Sobre la costa occidental del Atlántico de Noruega existe en los fiordos un lugar que da escalofríos. El viaje a Preikestolen le reserva el escalofrío de la «Roca del Púlpito». Visto desde abajo, esta roca parece un barco.
A diferencia de otras atracciones turísticas, llegar a Preikestolen no es tan fácil; se debe realizar una travesía andando que dura 2 1/2 horas, no muy larga, pero bastante incómoda. Los riachuelos que corren, junto con la cantidad de piedras que hay que ir salvando y con desniveles pronunciados te hace dudar de si merece la pena el esfuerzo. Cuando llegas se te olvida el esfuerzo y admiras tal dimensión y manifestación de la naturaleza.
Uno de los lugares más impresionantes de Noruega. El Púlpito (Preikestolen), una plataforma que se eleva 600 metros en vertical desde el fiordo y que acercase a su extremo causa auténtica sensación de vértigo.